CAPÍTULO 7: EL NUEVO SISTEMA

2000 años atrás las primeras normas acerca del mantenimiento del Azul fueron escritas en el Ordinem Internum Codex. El Códice detalla la doctrina de El Nuevo Sistema.

-Disculpe Magister Almund, ¿puedo hacerle una pregunta? – Nanna levantó su mano, agitándola rápidamente de izquierda a derecha para llamar la atención del instructor.

-Dime, Nanna

-Si las primeras normas acerca del mantenimiento del Azul fueron escritas hace 2000 años, ¿qué pasaba antes?

-¿Antes?

-Claro, antes de esos 2000 años ¿no había reglas?

De repente un profundo silencio invadió el salón. Los ojos de todos los presentes se abrieron, entre asombrados y temerosos.

-Nanna; nuestro mundo comenzó hace 2000 años. Es decir, tenemos 2000 años de antigüedad.

-Disculpe Magister Asmund, pero pienso que ha de haber un error en su información. Según mi investigación existen Registros anteriores al tiempo que usted ha mencionado como el comienzo de nuestro mundo, escondidos en algún sitio.

-¿Investigación? ¿A qué tipo de investigación te refieres? – el instructor Asmund miró a Nanna con ojos desconcertados. Su expresión inicial dejaba ver cierto rastro de preocupación, pero rápidamente ésta fue reemplazada por una de severidad.

-Disculpe Magister Asmund. Creo que Nanna sólo está midiendo su paciencia, como generalmente lo hace con el resto de los instructores. Le ofrezco mis disculpas en su lugar – Walmond rápidamente se levantó de su asiento, finalizando la frase con una leve inclinación de cabeza.

-Nanna, ¿es eso cierto? – indagó el instructor quien, evidentemente, se encontraba irritado.

Walmond levantó sutilmente la cabeza y fijó la mirada en Nanna, quien pareció comprender el mensaje silencioso que le estaba siendo enviado.

– Lo siento Magister Asmund. Debo mejorar mi tendencia a desafiar la autoridad. El Nuevo Sistema necesita soldados valientes y disciplinados, mi prioridad y único objetivo es servir al mismo con mi vida. Le pido acepte mi disculpa – Nanna ahora también se encontraba de pie, con su cabeza gacha y su brazo derecho sobre el pecho, emulando el gesto de lealtad hacia el Nuevo Sistema.

Mientras todos prestaban atención a la peculiar escena que estaba desarrollándose, el sonido que marcaba el final de la clase irrumpió.

-Pueden retirarse – dijo el Magister Asmund. – Nanna y Walmond, por favor quédense sentados. Preparen sus libretas, debo registrar lo ocurrido hoy.

Una vez que todos los presentes dejaron la sala, el instructor tomó las libretas de ambos y rápidamente hizo unas anotaciones. Al devolverselas detuvo su mirada por unos minutos en la de ellos, y con extremo cuidado movió sus ojos en dirección hacia donde se encontraban las cámaras de seguridad. Walmond y Nanna se retiraron del salón.

-Realmente estoy muy satisfecho con el trabajo del Magíster Asmund. Es una pieza única y de gran valor para el Nuevo Sistema – dijo el Líder Principal Basil, mientras miraba las imágenes de las cámaras de seguridad.

-Ciertamente – afirmó Gunvor. – Pienso que inclusive podría colaborar con la instrucción de los curatores.

Las largas uñas negras de su mano derecha se posaron sobre sus labios, y con su mano izquierda corrió su falda de lado, exponiendo sus largas piernas.

-Ya sabes que siempre estoy satisfecho contigo también. Ahora, deja de provocarme y regresa a tu trabajo. No tenemos tiempo que perder – le susurró el Lider Basil al oído.

Una vez en sus cuarteles, Walmond y Nanna abrieron sus libretas.

“No vuelvan a hacer algo así de estúpido nuevamente. De lo contrario, seremos descubiertos”

Disimuladamente, levantaron la pieza de papel escrito que había sido colocada sobre la libreta y la escondieron dentro de sus puños.

Tomaron una lapicera y firmaron la notificación de advertencia que ahora había quedado descubierta: “Llamado de atención por desafiar la autoridad”.

Guardaron sus libretas en sus bolsos y rápidamente salieron hacia su próxima lección